La claudicación intermitente es dolor en las piernas causado por aterosclerosis (endurecimiento de las arterias) en las extremidades inferiores.
[3 stars] | Ginkgo |
[3 stars] | Vitamina E |
[2 stars] | Ajo |
[2 stars] | L-Carnitina |
[1 star] | Aceite de Onagra |
[1 star] | Magnesio |
|
Los síntomas iniciales de la claudicación intermitente son dolor, calambres o fatiga muscular en las extremidades inferiores que aparecen al caminar y que se alivian rápidamente con el reposo. Estos síntomas ocurren principalmente en el área de la pantorrilla, pero pueden sentirse en el pie, el muslo, la cadera o los glúteos. En etapas más avanzadas, los síntomas dolorosos están presentes incluso durante el descanso y empeoran al elevar las piernas.
Los medicamentos de venta con receta que se prescriben para tratar la claudicación intermitente incluyen pentoxifylline (Trental®) y el antiplaquetario cilostazol (Pletal®). Además, los medicamentos para bajar el colesterol, como los secuestradores de sales biliares cholestyramine (Questran®) y colestipol (Colestid®) y los inhibidores de la HMG-CoA reductasa atorvastatin (Lipitor®), fluvastatin (Lescol®), lovastatin (Mevacor®), pravastatin (Pravachol®) y simvastatin (Zocor®), también se recetan en combinación con medicamentos para la claudicación.
Con frecuencia se recomiendan ejercicios de rehabilitación, bajar de peso y dejar de fumar. Las opciones quirúrgicas para restaurar el suministro de sangre, llamadas procedimientos de "revascularización", se reservan para personas con síntomas progresivos o incapacitantes.
Dejar de fumar: Fumar está directamente relacionado con la claudicación intermitente.
Ejercicio moderado: Aunque el ejercicio puede ayudar al tratamiento de la claudicación intermitente, es importante que las personas con este problema consulten con un profesional de la salud antes de iniciar un programa de ejercicios.
Precaución: Un estudio mostró un ligero incremento en el riesgo de someterse a cirugía vascular entre las personas con claudicación intermitente que tomaron suplementos de beta caroteno. Hasta que se cuente con más información, las personas con claudicación intermitente que quieran tomar suplementos de beta caroteno deben consultar primero con su médico.
Hexaniacinato de inositol (vitamina B3) (2 gramos dos veces al día, durante tres meses): Este tratamiento debe supervisarlo un médico.
Propionil-L-carnitina: 1 gramo al día, incrementando a 2 gramos diarios después de dos meses y a 3 gramos diarios después de otros dos meses, en caso de ser necesario.
Vitamina E (De 400 a 600 UI diarias durante un mínimo de cuatro a seis meses): En pruebas controladas se ha encontrado que un suplemento de vitamina E incrementa tanto la distancia de caminado como el flujo de sangre a través de las arterias de la parte inferior de las piernas en pacientes con este problema. Incrementar el consumo de vitamina E en la dieta también se asoció con un mejor flujo de sangre a las piernas.
Arginina (sólo intravenosa): Este tratamiento debe administrarlo un médico.
L-carnitina: 2 gramos dos veces al día.
Ginkgo biloba (120 mg de extracto de Ginkgo biloba al día): Los extractos de Ginkgo biloba, en particular el EGb 761, se han estudiado ampliamente para tratar la claudicación intermitente. Varias pruebas clínicas doble ciego al azar han mostrado que el EGb 761 mejora significativamente la distancia máxima que puede caminarse sin dolor, así como la función vascular periférica en pacientes con claudicación intermitente. Los metaanálisis de pruebas clínicas controladas han confirmado estos efectos.
Ajo (Allium sativum): 400 mg dos veces al día, durante 12 semanas.
Padma 28® (760 mg dos veces al día): Padma 28 es una fórmula herbolaria tibetana.
Evitar la carne y los productos lácteos
Incrementar la fibra
Evitar alimentos que contengan ácidos grasos trans
Copyright © 2025 TraceGains, Inc. Todos derechos reservados.
Aprenda más acerca de TraceGains, la compañía.
Aprenda más acerca de los autores de los productos de TraceGains.
La información que se presenta en TraceGains no pretende nada más que informarle al consumidor con resultados interpretados de estudios científicos. A pesar de basarse en la investigación científica (humana, animal o in vitro), en la experiencia clínica o en la observación de su aplicación en el uso tradicional, la información que se presenta en TraceGains y que se cita en cada artículo no pretende nada más que informarle al público. Además, es posible que no se logren los resultados presentados en todos los individuos. Enfermedades con peligro para la vida requieren tratamiento por prescripción facultativa y no se recomienda que intente curarlas sin que vigile un médico. Con respecto a muchas de las enfermedades discutidas, están disponibles medicamentos con y sin receta médica. Consúltese con su médico y/o farmacéutico para discutir cualquier problema de salud y siempre antes de utilizar cualquier suplemento o efectuar cualquier cambio con respecto a los medicamentos recetados que se toma. Esta información es válida hasta finales de Diciembre del 2025.