Enfermedad de Ménière
Informacíon sobre esta condición
Suplementos útiles
- Datos científicos fiables y relativamente consistentes que le muestran un benificio considerable a la salud.
- Estudios contradictorios, insuficientes o preliminarios que meramente le sugieren o que le benifician poco a la salud.
- Para el uso de hierbas con entre muy poca hasta ninguna aprobación científica, pero apoyado por uso tradicional.
 [2 stars] | Flavonoides |
 [1 star] | Ginkgo |
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Síntomas
Las personas con enfermedad de Ménière pueden sufrir de vértigo, asociado con náusea y vómitos. Los síntomas pueden incluir una sensación recurrente de plenitud o presión en el oído afectado y dificultad para oír. Las personas con enfermedad de Ménière también pueden sufrir de tinitus, que puede ser intermitente o continuo. Los síntomas de este padecimiento se asocian con un problema subyacente conocido como hidropesía endolinfática, una acumulación excesiva del líquido del oído interno. Cuando las personas tienen sólo uno de los síntomas relacionados con la enfermedad de Ménière, como tinitus o vértigo, por lo general se considera que se trata de otra enfermedad.
Otras terapias
Para tratar el mareo pueden usarse antihistamínicos de venta sin receta, como dimenhydrinate (Dramamine®), meclizine (Bonine®) y cyclizine (Marezine®).
Los anticolinérgicos de venta con receta, como scopolamine (Transderm-Scop®), prochlorperazine (Compazine®) y trimethobenzamide (Tigan®), así como los sedantes como diazepam (Valium®), lorazepam (Ativan®) y alprazolam (Xanax®), se usan con frecuencia para tratar los síntomas de este padecimiento.
Las personas que se ven afectadas con frecuencia por un vértigo incapacitante pueden requerir tratamiento quirúrgico (neurectomía vestibular o laberintectomía). Algunas personas pueden beneficiarse con el uso de un enmascarador de tinitus, un aparato auditivo que produce un sonido que es más tolerable que el zumbido en los oídos. Los profesionales de la salud también pueden recomendar el uso de tapones en presencia de ruidos intensos, para evitar el daño a los oídos.
Sugerencias para una vida saludable
Dentro de los cambios en el estilo de vida que se recomiendan con frecuencia a los pacientes con esta enfermedad está la eliminación de la cafeína, la nicotina y el alcohol. Aunque no se ha comprobado científicamente, se cree que el consumo de estas sustancias incrementa la frecuencia de ataque de la enfermedad.
Opciones holísticas
Terapia física: Las personas con la enfermedad de Ménière padecen con frecuencia problemas musculoesqueléticos en la cabeza y el cuello. En un informe preliminar se afirma que la terapia física de la columna ayuda a aliviar los síntomas en algunos casos.
Apoyo psicológico: Algunos investigadores recomiendan la asesoría psicológica para reducir tanto la perturbación emocional que significa padecer esta enfermedad como los síntomas que puedan ser provocados por el estrés.
Ejercicio: Algunos de los principales investigadores recomiendan que los pacientes con esta enfermedad practiquen ejercicios de rehabilitación vestibular, que se usan sobre todo para recuperarse del vértigo. De acuerdo con estas autoridades en la materia, los ejercicios deben iniciarse sólo después de que los síntomas se hayan estabilizado con otros tratamientos, y no deben realizarse cuando la enfermedad esté activa. Es necesario consultar a un especialista en atención al aparato musculoesquelético.
Estimulación nerviosa eléctrica transcutánea (TENS): Los estudios preliminares han informado que la TENS, una forma de fisioterapia que utilizan los especialistas en salud musculoesquelética, reduce el tinitus en personas con enfermedad de Ménière. El 60% de las personas con la enfermedad informaron de una mejoría significativa después del tratamiento.
Acupuntura: En estudios preliminares se ha informado que la acupuntura reduce los síntomas de la enfermedad de Ménière.
Suplementos útiles
Flavonoides: En un estudio de doble ciego se encontró que algunos flavonoides, conocidos como hidroxietilrutósidos (HR), ayudan en los síntomas de la enfermedad de Ménière. En este estudio, el uso de 2 gramos de HR diarios durante tres meses dio por resultado una mejoría o estabilización en la audición.
Ginkgo biloba: Aunque el extracto de Ginkgo biloba (GBE) no se ha estudiado específicamente por sus efectos en la enfermedad de Ménière, en estudios preliminares se ha visto que reduce los síntomas de tinitus, vértigo y pérdida auditiva debida a problemas inespecíficos en el oído interno. Es necesario llevar a cabo un estudio controlado usando GBE para determinar si es una opción de tratamiento adecuada para esta enfermedad.
Una dieta más sana puede manejar mejor los síntomas de muchas enfermedades y encima aumentar la calidad de la vida en general. Con respecto a esta condición, los científicos han comprobado que comer más sano puede aliviar sus síntomas.
Algunos casos de enfermedad de Ménière se relacionan con anormalidades en la regulación del azúcar en sangre, como diabetes e hipoglicemia. En un estudio preliminar, se encontró que una dieta para hipoglicemia modificada, con un consumo moderado de proteína y un consumo entre moderado y bajo de grasa, redujo los síntomas de la enfermedad en un gran número de pacientes con niveles anormales de azúcar en sangre. Además se prohibieron los carbohidratos refinados, el alcohol y la cafeína y se recomendó a los pacientes tomar comidas pequeñas y frecuentes y consumir refrigerios entre comidas. La mayoría de los participantes recibió también suplementos de calcio, fluoruro y vitamina D, de modo que la importancia de estos cambios en la dieta en la efectividad general del programa no puede determinarse.
Dieta baja en sal: Se cree que una dieta baja en sal (no más de 800 a 1,000 mg de sodio al día) combinada con un diurético reduce la hidropesía endolinfática y con frecuencia se recomienda a quienes padecen esta enfermedad.
Alergias: La enfermedad de Ménière se asocia en algunas personas con alergias a partículas en el aire, mohos y alimentos, según se ha visto en muchos informes preliminares. En un estudio controlado, los pacientes con enfermedad de Ménière que recibieron tratamiento contra la alergia, incluyendo evitar los alimentos sospechosos de provocarla, mostraron una mejoría importante en los síntomas de tinitus, vértigo y audición. En este estudio, las alergias alimentarias más comunes fueron al trigo y la soya. La mayor parte de los participantes tenían además alergias a la leche, el maíz, los huevos y la levadura.
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