El síndrome de inmunodeficiencia adquirida (SIDA) es una enfermedad en la que el sistema inmunológico se debilita gravemente y pierde su capacidad para combatir las infecciones.
[2 stars] | Dehidroepiandrosterona |
[2 stars] | N-Acetilcisteína |
[2 stars] | Regaliz |
[2 stars] | Selenio |
[2 stars] | Zinc |
[1 star] | Ácido Fólico |
[1 star] | Ajo |
[1 star] | Andrographis |
[1 star] | Árbol del Té |
[1 star] | Beta Caroteno |
[1 star] | Coenzima Q10 |
[1 star] | Cúrcuma |
[1 star] | Eleutero |
[1 star] | Equinácea |
[1 star] | Extractos de Timo |
[1 star] | Ginseng Asiático |
[1 star] | Glutamina |
[1 star] | Hierro |
[1 star] | Hipérico |
[1 star] | Maitake |
[1 star] | Metionina |
[1 star] | Muérdago |
[1 star] | Proteína del Suero de la Leche |
[1 star] | Reishi |
[1 star] | Shiitake |
[1 star] | Uña de Gato |
[1 star] | Vitamina A |
[1 star] | Vitamina B1 |
[1 star] | Vitamina B12 |
[1 star] | Vitamina B3 |
[1 star] | Vitamina B6 |
[1 star] | Vitamina E |
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El VIH provoca un amplio espectro de problemas clínicos que con frecuencia simulan otras enfermedades. Pocas semanas después de la infección, algunas personas pueden experimentar síntomas similares a la gripe, incluyendo fiebre, malestar, erupciones, dolor en las articulaciones e hinchazón generalizada de los ganglios linfáticos. Estas manifestaciones agudas por lo general desaparecen y mucha gente permanece asintomática durante largos periodos. El SIDA, el síndrome clínico asociado con la infección por VIH, produce síntomas en todo el organismo relacionados con infecciones por microorganismos oportunistas, tumores y otras complicaciones debidas a la deficiencia en el sistema inmunológico.
Se utilizan tres tipos principales de medicamentos antivirales de receta médica para tratar la infección por VIH. El primer grupo, los inhibidores nucleosídicos de la transcriptasa inversa, incluye zidovudine (ZDV,AZT, Retrovir®), didanosine (ddI,Videx®), zalcitibine (ddC, Hivid®), stavudine (d4T, Zerit®) y lamivudine (3TC, Epivir®). El segundo tipo son los inhibidores no nuclosídicos de la transcriptasa inversa, que incluyen nevirapine (Viramune®) y delavirdine (Rescriptor®). El tercer grupo está formado por los inhibidores de la proteasa, entre los que se encuentran saquinavir (Fortovase™, Invirase™), ritonavir (Norvir®), indinavir (Crixivan®) y nelfinavir (Viracept®). También se emplean muchos otros medicamentos experimentales. El tratamiento convencional incluye dos a cuatro de estos medicamentos. El tratamiento de las complicaciones del SIDA es específico para cada infección o problema que se presenta y con frecuencia incluye antibióticos, antimicóticos, corticosteroides y medicamentos para el corazón.
Arginina, (en combinación con HMB y glutamina para conservación del peso corporal magro): En una prueba, los participantes recibieron placebo o una mezcla de nutrientes con 1.5 gramos de HMB, 7 gramos de L-glutamina y 7 gramos de L-arginina dos veces al día durante ocho semanas. Quienes tomaron la mezcla de nutrientes ganaron un promedio de tres libras (1.36 kg) de peso, 85% del cual fue peso magro, mientras que los pacientes que recibieron el placebo ganaron apenas 0.37 libras (167 gramos), casi todo grasa, pero perdieron masa corporal magra.
Dehidroepiandrosterona (DHEA) (Para tratar la fatiga y la depresión) (de 200 a 500 mg diarios durante ocho semanas): Las dosis elevadas de DHEA pueden aliviar la fatiga y reducir la depresión en hombres y mujeres con VIH. Esta dosis de DHEA es sumamente alta, de modo que su administración debe supervisarla un médico.
Vitaminas y minerales múltiples: Dado que los pacientes con VIH o SIDA con frecuencia padecen deficiencias nutricionales múltiples, consumir un suplemento nutricional con una amplia gama de componentes puede resultar benéfico.
N-acetilcisteína (NAC) (800 mg diarios): En pruebas de laboratorio se ha visto que este aminoácido inhibe la replicación del VIH y puede reducir la velocidad con la que el sistema inmunológico se deteriora en los pacientes con SIDA. La NAC mejora la síntesis de glutatión, un antioxidante natural que se cree protege a los pacientes infectados con VIH.
Saccharomyces boulardii (1 gramo tres veces al día): Un suplemento de S. boulardii puede ser útil para tratar la diarrea en personas con VIH. Sin embargo, se ha informado que pacientes cuyo sistema inmunológico está muy deteriorado han desarrollado infecciones en el torrente sanguíneo por levaduras tras ingerir levaduras que son benignas en individuos sanos. Por esa razón, los pacientes con VIH que deseen tomar S. boulardii, levadura de cerveza (S. cerevisiae) o cualquier otro microorganismo vivo deben consultar a su médico.
Selenio (de 200 a 400 µg diarios): La deficiencia de selenio es un factor independiente que se asocia con una mortalidad elevada entre los pacientes con VIH. Las personas infectadas con el virus del SIDA a las que se les dio un suplemento de selenio experimentaron menos infecciones, una mejor función intestinal y más apetito, además de una mejoría en las funciones cardiacas (que estaban afectadas por la enfermedad). Quienes deseen utilizar un suplemento con más de 200 µg de selenio al día, deben hacerlo bajo supervisión médica.
Boj (Buxus sempervirens) (990 mg al día de extracto de las hojas y el tallo): En un estudio doble ciego se encontró que el extracto de boj puede hacer más lento el avance de la infección por VIH (medido por un declive en la cifra de linfocitos CD4).
Regaliz (Glycyrrhiza glabra) (2 gramos de raíz de regaliz diarios, en cápsulas o té): En pruebas de laboratorio, el regaliz ha logrado inhibir la multiplicación del VIH. Los estudios han demostrado que las inyecciones de glicirricina (que se aisla del regaliz) pueden tener un efecto benéfico en pacientes afectados de SIDA. Existen evidencias preliminares de que la administración de regaliz por vía oral es segura y efectiva para el tratamiento a largo plazo del VIH. Las cantidades de regaliz o glicirricina que se usan para tratar a los pacientes con VIH requieren la supervisión de un médico, porque el uso a largo plazo de estas sustancias puede causar hipertensión, pérdida de potasio u otros problemas. El regaliz de-glicirrhizinazado no inhibe al VIH.
Sangre de Drago (para la diarrea asociada con el VIH): Un extracto del látex de la corteza del tallo de sangre de drago (Croton lechleri), una hierba de la cuenca del Amazonas en Perú, ha probado tener un efecto antidiarreico significativo en los estudios preliminares doble ciego. Investigaciones doble ciego adicionales demostraron la efectividad del extracto para tratar la diarrea relacionada con el VIH y el SIDA. En los estudios se usaron dosis muy elevadas de este extracto (de 350 a 700 mg cuatro veces al día durante siete días o más). La administración de estas dosis de suplemento siempre debe ser supervisada por un médico.
Aunque actualmente no existen pruebas de que un cambio en la alimentación sea curativo para los pacientes con SIDA, o que tenga siquiera un impacto importante en la evolución de la enfermedad, las siguientes sugerencias podrían ser útiles:
Una dieta alta en proteínas y en calorías: Las personas enfermas de SIDA con frecuencia pierden mucho peso o sufren de diarrea recurrente. Una dieta alta en proteínas y en calorías totales podría ayudar al paciente a mantener su peso corporal.
Consumir alimentos integrales: Las personas infectadas con VIH tienden a padecer deficiencias nutricionales. Los alimentos integrales a menudo contienen mayores cantidades de vitaminas y minerales que los alimentos procesados.
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